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Por qué la ecología trófica marina está en riesgo por el cambio climático

La dinámica alimentaria de diversas especies está siendo afectada por el fenómeno climático.

13-05-2021

Por Isabel Pérez Solís, Ciencia UNAM-DGDC

El aumento de la temperatura y el exceso de radiación ultravioleta afectan negativamente al fitoplancton y zooplancton, elementos importantes en la ecología trófica marina, lo que a su vez desencadena una serie de efectos que se resienten en todos los niveles de la dinámica alimentaria del mar.

Los sistemas arrecifales se han identificado como ecosistemas muy susceptibles ante el cambio climático, evidenciado por cambios fisiológicos que conllevan al incremento del llamado blanqueamiento del coral, por lo que muy probablemente los arrecifes mexicanos también estén sufriendo este fenómeno, señala la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT).

La ecología trófica se refiere al estudio de la dinámica alimentaria de los organismos y sus interacciones (por ejemplo, las relaciones presa-depredador) en un ecosistema dado bajo la perspectiva funcional; son esas relaciones las que definen la dinámica de las redes alimentarias.

Con las condiciones que impone el cambio climático, esta dinámica se ha visto afectada, pues los ecosistemas tienen que hacer adecuaciones para enfrentar las nuevas circunstancias que, generalmente, se relacionan con el cambio de temperatura a partir de una anomalía cada vez más grande en los patrones de distribución de calor en el planeta, destaca Xavier Chiappa Carrara, director de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES), Mérida.

Aumento en el nivel del mar

“No se trata únicamente de la temperatura, también existen cambios en la altura del nivel del mar, lo que se conoce como elevación del nivel del mar, registrada en los últimos cien años, pero en las tres décadas recientes, el proceso se ha acelerado hasta alcanzar tres milímetros por año en algunas zonas, lo que en términos de distribución, abundancia y ecología de muchas especies rebasa sus capacidades de adecuación”.

Otro tipo de alteraciones que suceden con el cambio climático tienen que ver con los procesos de erosión y acreción de las líneas de costas. Esto se refiere al conjunto de procesos naturales responsables de los cambios en la extensión de las playas, el retroceso de las dunas y acantilados. Da forma a la costa por la acción de las olas, corrientes y el viento.

Adicionalmente, se percibe una modificación relacionada con el ingreso de nutrientes al océano, lo cual genera zonas eutróficas (con exceso de nutrientes) así como anóxicas (sin oxígeno); se ha observado que, por estos efectos, se ha incrementado la pérdida de biodiversidad.

Más del 90% del calentamiento global se concentra en los océanos, precisa el especialista en Oceanografía Biológica. 

De las consecuencias más observables, está la distribución de los organismos que suelen depender de la temperatura para realizar parte de sus funciones biológicas; algunos necesitan de condiciones muy específicas para regular las reacciones bioquímicas, ya que no controlan por sí mismos su temperatura.

Cuando cambia la distribución de los organismos, también cambia la manera en que se estructuran las comunidades biológicas, y por lo tanto, se modifica la forma en que se relacionan. En este contexto, la relación entre los depredadores y las presas, igualmente sufre alteraciones. Así, insiste Xavier Chiappa, el cambio climático tiene efectos en el proceso de la dinámica alimentaria en el mar.

El sistema oceánico, de los más afectados

  • Entre las especies más sensibles a los cambios de temperatura, de salinidad o acidificación, podemos encontrar a las tortugas marinas, algunas especies de peces, pingüinos, ballenas y, de manera muy particular, los corales.

El calentamiento global debe entenderse como un problema que complica y agrava las funciones del ecosistema. Además de todo lo anterior, tiene la capacidad de alterar la forma en que reaccionan los carbonatos de calcio en el agua de mar en función de los cambios del pH, lo que ocasiona que se acidifique en unas regiones más que en otras.

De acuerdo con un estudio recientemente publicado en la revista Frontiers in Conservation Science, señala Chiappa Carrara, uno de los sistemas más afectados en el planeta por el cambio climático, es el sistema oceánico, derivado, precisamente, de la capacidad calorífica asociada a la estructura de la molécula de agua que ha permitido la acumulación de grandes cantidades de calor.

Esa misma investigación estima que alrededor del 75% del océano puede tener algún grado de afectación.

El artículo señala que la escala de las amenazas a las que se enfrenta la biósfera y todas sus formas de vida, incluida la humanidad, es tan grande que incluso, es complicado que los especialistas puedan llegar a comprenderla. Todo esto significa que el planeta se encuentra en un punto de quiebre muy grave.

Redes tróficas y contaminación

La contaminación marina es otro problema severo que aqueja a los océanos y a las redes tróficas marinas, pues se ha encontrado que artefactos de plástico, metal o vidrio forman parte de la dieta de varios peces, ya que por la forma, el color o el tamaño, las especies las confunden con alimento y llegan a ingerirlos accidentalmente.


Las diversas actividades antropogénicas que por años se han llevado a cabo, están afectado considerablemente no sólo la vida marina, sino la biodiversidad en general.

La actividad pesquera y la extracción de productos del mar de forma excesiva tendrán efectos negativos, ya que ocasionan cambios importantes en la infraestructura y el funcionamiento de los ecosistemas; pero también tendrá efectos negativos para los humanos.

“El futuro de nuestros océanos se ve amenazado por el cambio climático, la acidificación, la contaminación, las prácticas pesqueras insostenibles y destructivas, y la falta de capacidad para hacer frente a estas amenazas”, ha dicho António Guterres, secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), tiene entre sus objetivos para el año 2030, aumentar los conocimientos científicos, desarrollar la capacidad de investigación y transferir la tecnología marina, teniendo en cuenta los criterios y directrices para la transferencia de tecnología marina de la Comisión Oceanográfica Intergubernamental, a fin de mejorar la salud de los océanos.

El organismo además promueve el uso sostenible de los océanos y sus recursos aplicando el derecho internacional reflejado en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar.

Buena parte del trabajo de investigación que ha realizado el Doctor Xavier Chiappa Carrara, se centra en entender el papel de organismos en ecosistemas acuáticos y conocer los factores que determinan la estructura de las comunidades. Ha estudiado, desde el punto de vista funcional, los cambios que experimentan los organismos en las distintas fases de sus ciclos de vida.


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