Especial Arqueología Mexicana: exploración bajo el mar

En México, la arqueología subacuática ha permitido recuperar valiosos objetos que posibilitan la reconstrucción de nuestra historia, aunque la localización llega a ser todo un desafío.

Es el caso de la búsqueda del galeón Nuestra Señora del Juncal, hundido en la sonda de Campeche cerca de 1631, después de zarpar desde el puerto de Veracruz con rumbo a Sevilla, España. 

Se trata de uno de los naufragios a los que la arqueología subacuática mexicana, a través del INAH, le ha dedicado especial atención por su riqueza histórica, patrimonial y material.

Parte importante del cargamento de Nuestra Señora del Juncal eran metales preciosos y piezas de artillería de la época. Vestigios que, más que representar un tesoro material, encontrarlos posibilitaría la reconstrucción de una parte de la historia del México colonial a través de su estudio.

• La arqueología subacuática es “la ciencia que estudia los procesos sociales del pasado a través de la riqueza material que yace bajo los cuerpos de agua”,  según el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Además de barcos o restos de los mismos, esta  disciplina investiga los vestigios que pudieran estar en cuevas sumergidas, en cenotes y en otros cuerpos de agua, haciendo uso de técnicas y tecnologías que ayudan a la localización.

Los modelos matemáticos también han sido de gran utilidad en la búsqueda de Nuestra Señora del Juncal,  para tener una aproximación a la zona del hundimiento. Así a través de la recuperación de los vestigios sumergidos, la arqueología subacuática contribuye a la conservación del patrimonio histórico y cultural.

Los primeros trabajos de exploración subacuática en México se remontan a la década de 1950 y principios de los 60, cuando expertos mexicanos y extranjeros recuperaron vestigios prehispánicos de un naufragio en Quintana Roo.

Conoce más de la historia de esta ciencia en México, a los pioneros, los proyectos más destacados y sus metas, a través de los siguientes videos.