15-01-2018
Por Carla Torres, Ciencia UNAM, DGDC
Todos los días en televisión, la radio o en algún anuncio por la calle, la frase “Cuida el agua” nos invita a reflexionar sobre el uso que le damos a este recurso. También se nos recuerda el valor que tiene para la vida de este planeta: sin agua, la vida en la Tierra desaparecería en tan solo algunos días.
Pero más allá de los recordatorios, especialistas coinciden en que el agua es mucho más que un recurso; es un tema que toca a disciplinas como la ingeniería, la medicina, la biología, la geografía, la sociología y la economía, además somos poco conscientes de su relación con otros recursos.
Cecilia Lartigue, coordinadora ejecutiva del Programa de Manejo, Uso y Reuso del Agua (PUMAGUA) de la UNAM, señala que uno de los conflictos principales que existen en México, es que no pensamos en la relación del uso de suelo con el vital líquido.
“Esta relación es directa: si talamos árboles, el agua no se puede infiltrar y por lo tanto, no llegará a los mantos acuíferos, y de no tener agua en los acuíferos, no podremos acceder a ella para nuestra vida diaria”.
En la Ciudad de México dependemos en gran medida del agua que se infiltra en la zona sur de la ciudad. El 70 por ciento del líquido que llega a los acuíferos viene de ahí y si pensamos en la sobre explotación que sufren estos mantos, nos damos cuenta de serias consecuencias, tales como el hundimiento de zonas que van desde los cinco centímetros, hasta socavones, lo que pone en riesgo a la ciudadanía, alertó.
Si vemos la problemática del agua para las necesidades diarias del ser humano, podemos visualizar sin problemas las consecuencias de no contar con ella, sin embargo, otro aspecto que a veces olvidamos es su relación ambiental.
Elena Abraham, directora del Instituto de Investigaciones de las Zonas Áridas del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina, ha detallado la importancia de no olvidar la influencia del recurso en los ecosistemas.
“América Latina está en un momento muy crítico con la situación, tanto de acuíferos superficiales, como subterráneos. Lo que se vuelve dramático si consideramos que 25 por ciento de las tierras de América Latina son tierras secas”.
La desertificación, la tala inmoderada y convertir algunas zonas en desiertos, son de los mayores problemas en la región. Y si se combina con el cambio climático, la situación empeora.
En América Latina, la presencia y participación de expertos en foros internacionales acerca del agua, es un tema prioritario en todos los consejos de investigaciones científicas, pero ¿qué podemos hacer los ciudadanos para mejorar su manejo?
- Acciones individuales como disminuir los tiempos en la ducha, utilizar la lavadora solo con carga llena, regar el jardín por la noche y revisar que no haya fugas, son formas de contribuir al buen manejo del recurso.
En opinión de algunos investigadores, el cuidado del agua tiene mucho que ver con la participación ciudadana, solo así es posible presionar a los tomadores de decisiones con demandas concretas invitando a las buenas prácticas.
La Agenda Ciudadana en Iberoamérica es un ejercicio público que incorpora éste y siete temas más a la búsqueda de una sociedad del conocimiento. Puedes participar en http://www.agendaiberoamericana.org/mexico .
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