05-08-2020
Por Ma. Luisa Santillán/Luz Oliva, Ciencia UNAM-DGDC
La clamidia es una enfermedad de transmisión sexual causada por la bacteria Chlamydia trachomatis. Afecta tanto a hombres como a mujeres. La infección se da principalmente por vía sexual, ya sea de forma vaginal, anal o incluso oral.
Se trata de una bacteria que infecta las células a nivel de las mucosas. Muchas veces las infecciones por Chlamydia trachomatis pasan de forma asintomática y cuando se manifiesta alguna sintomatología, no es tan evidente; por ejemplo, pueden ser molestias para orinar como ardor o una cistitis.
Además, podría presentarse cierta secreción vaginal en las mujeres o uretral en el caso del hombre. “Cuando esas infecciones se llegan a identificar es porque ya estuvieron mucho tiempo en el organismo, ya dejaron algunas secuelas”, explicó la doctora Susana del Carmen Haquet Santana, de la Facultad de Medicina de la UNAM.
Algunas complicaciones que se presentan en las mujeres que no han sido diagnosticadas a tiempo con clamidia son enfermedad pélvica inflamatoria, que es una infección de los órganos internos como el útero, las trompas de Falopio e incluso podía llegar a haber un absceso pélvico.
La también es ginecoobstetra del Hospital de Ginecoobstetricia Número 4 del IMSS, recomienda realizarse un chequeo general una vez que se inició la vida sexual, con el fin de poder identificar este tipo de infecciones.
Un riesgo de salud para todas las edades
-La clamidia es la enfermedad de transmisión sexual más común en México. La segunda más frecuente es la gonorrea. Otros riesgos de salud son el virus del papiloma humano, la ureaplasma y las micoplasmas, que pueden causar afectaciones en la vida reproductiva de la mujer.
-Las personas que están más en riesgo de contraer una enfermedad de transmisión sexual, son aquellas que son sexualmente activas, que iniciaron su vida sexual muy tempranamente o que tienen varias parejas sexuales al año y no utilizan el preservativo.
-Cuando una mujer está embarazada se puede infectar con Chlamydia trachomatis e incluso afectar al bebé. Los riesgos son múltiples debido a que se puede presentar una infección neonatal y el bebé puede nacer con neumonía o incluso llega a tener conjuntivitis.