15-06-2020
Por Isabel Pérez /Beatrix Gutiérrez de Velasco. Ciencia UNAM-DGDC
Los volcanes de México forman parte del Cinturón de Fuego, una zona del Océano Pacífico muy propensa a la actividad sísmica y volcánica; además se asocia con la formación de grandes montañas.
“Esta zona ha llamado la atención de los científicos desde hace tiempo; de hecho, desde hace más de cincuenta años se sabe que las diferentes placas tectónicas que conforman la superficie terrestre se juntan unas con otras e interactúan para formar este cinturón”, afirmó el sismólogo Raúl Valenzuela Wong, investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM.
La superficie de la Tierra está dividida en placas tectónicas, las cuales podrían compararse con las piezas de un enorme rompecabezas; entre ellas existe una interacción importante, registrando movimientos lentos de unos cuantos centímetros al año.
En términos geológicos, el Cinturón de Fuego marca los bordes de la placa del Pacífico y de otras pequeñas placas tectónicas que forman la corteza terrestre. En esta zona se registra una altísima actividad sísmica y volcánica.