11-08-2014
Por Isabel Pérez S., DGDC-UNAM
Kanek, Kanek sufriré sin guía, Josefinita
kamoter mode harán,
recuerduter pakara sin día
herida mi alma y triste mi corazón…
"La Josefinita" es una pirekua ha sido escuchada alrededor del mundo; es una canción original purépecha y una de las composiciones más grabadas y conocidas de la música purhembe del pueblo de Zacán, Michoacán.
La pirekua es el canto tradicional de la comunidad purépecha del estado de Michoacán. En su lengua significa canción y por lo general, las pirekuas se cantan en la lengua nativa o en castellano; algunas incluso intercalan ambos idiomas y otras tantas son interpretadas instrumentalmente. Se destacan por su carácter noble, nostálgico y sentimental.
Georgina Flores Mercado considera que esta música tan particular de los pueblos indígenas michoacanos, se encuentra en un estado de resistencia, pues aunque los purépechas tratan de mantener esta tradición, música como la tecnobanda o comercial, han ido ganando terreno en estas colectividades.
De ahí la importancia de que las comunidades indígenas posean sus propias estaciones de radio donde se transmita la música originaria y se preserve la tradición, en este caso, de la pirekua, comentó la integrante del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, entrevistada con motivo del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, que se celebró el 9 de agosto.
Reconoció que no existe el riesgo de que desaparezca, pues es una tradición que se ha ido diversificando. Anteriormente, sólo se tocaba con instrumentos de cuerda como guitarras, violín y tololoche; hoy se han incluido el teclado, la guitarra eléctrica y el bajo, entre otros; es una práctica muy arraigada en las comunidades.
“Este cantar es muy cotidiano en las regiones purépechas; las abuelas o las mamás cantan pirekuas a los niños y de esa manera es que puede avivarse y seguir con esta tradición musical”, detalla.
En noviembre de 2010, la pirekua fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial por la UNESCO. El nombramiento reconoce el valor de esta ancestral tradición musical que transmite las vivencias cotidianas del pueblo purépecha en su lengua original.
Las melodías están basadas en los dos ritmos de la música tradicional purépecha: el son y el abajeño. La pirekua ha sido fundamental para preservar la lengua y la cultura. A través de esta expresión musical se transmiten valores éticos, el pensamiento y la memoria de su devenir histórico y social, comenta la investigadora.
Se dice que este canto data de la época prehispánica; se le relacionaba con ceremonias, rituales y bendiciones de pueblos y comunidades que se llevaban a cabo previo a la llegada de los españoles.
Otras versiones indican que la pirekua está relacionada con la colonización y con la fusión de formas y estructuras musicales asociadas con el mundo hispánico. Lo cierto, es que estos cantos son y han sido muy importantes para los pueblos indígenas, específicamente purépechas, desde antes de la llegada de los españoles.
Luego de este suceso, afirma la doctora en psicología, la tradición se transforma totalmente debido al proceso de evangelización, pues ya no podían cantarle a sus deidades ni a sus gobernantes.
Estos cánticos emiten mensajes de tristeza, amor, desamor, de la historia purépecha y de Michoacán; también de la geografía de la entidad y de la vida social de la comunidad, de los problemas sociales o del medio ambiente. También se dan consejos a los amigos o a los jóvenes de la comunidad a través del canto.
En las comunidades se realizan competencias donde la audiencia de la zona es la que decide cuál es la mejor pirekua. Es en estos espacios sociales donde se mantiene viva; sin embargo, se considera que en los concursos organizados por instituciones se acaba la tradición porque intervienen parámetros académicos para evaluarla, explica la especialista.
De igual forma, mencionó que en comunidades de la región lacustre michoacana como Janitzio, Jarácuaro, la Pacanda o Ihuatzio, es donde se cultiva la pirekua.
Sin embargo, la pirekua es poco conocida, incluso, dentro de Michoacán, advirtió. Por ello, muchos pireris y músicos son discriminados cuando interpretan este canto en restaurantes, plazas u otros espacios mestizos, además de que los compositores, pireris y músicos purépechas reciben muy poco apoyo para recrear su música.
¡Que no se pierda la tradición musical de la pirekua!