Coronavirus. La respuesta de Taiwán a la pandemia COVID-19

Cuando surgió la epidemia por el nuevo coronavirus en China, una de las naciones en las que se esperaba que hubiera el mayor número de casos fue Taiwan, por su cercanía a China y por que entre 800 mil y 400 mil ciudadanos de este país viven o trabajan en China. Sin embargo este país ha estado en alerta y listo para reaccionar a epidemias originadas en China desde el brote del Sindrome Respiratorio Severo Agudo (SARS) en el 2003.

En un artículo publicado en el sitio web del Journal of the American Medical Association  destaca la importancia de entender las acciones que llevó a cabo Taiwan y reconocer su efectividad, considerando que podrían ser instructivas para otros países.

Cuando se originó la entonces epidemia, Taiwan rápidamente se movilizó e instituyó medidas para la identificación de casos, el confinamiento y la asignación de recursos para proteger la salud pública. Por ejemplo, mejoró su base de datos nacional de seguros médicos integrándola con su base de datos de inmigración y aduanas para iniciar la creación de una base de datos a gran escala para análisis.

Entre otras cosas este analisis big data permitió lanzar alertas en tiempo real durante una visita clínica basándose en el historial de viajes y los síntomas clínicos. Estas alertas ayudaron en la identificación de casos.

Otro aprovechamiento de nuevas tecnologías fue el uso de códigos QR y reportes en línea de los historiales de viajes cruzados con reportes de síntomas. Esto se usó para clasificar el riesgo infeccioso de los viajeros de acuerdo con el origen de su vuelo y su historial de viaje de los ultimos 14 días.

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Con estas herramientas, logró que personas con bajo riesgo infeccioso recibieran un mensaje de texto en sus celulares para acelerar los procesos de inmigración, por otro lado, los viajeros con alto riesgo se les pidió que permanecieran en cuarentena en casa y se les monitoreaba mediante su celular para asegurarse que se mantuvieran en casa durante el periodo de incubación.

De igual manera se buscó proactivamente pacientes con la COVID-19 entre aquellas personas que presentaban síndrome respiratorio severo agudo, pero que habían dado resultados negativos a las pruebas de influenza.

El 31 de diciembre, apenas se notificó a la Organización Mundial de la Salud de la existencia de un nuevo virus, entonces oficiales de salud de Taiwan comenzaron a abordar los vuelos provenientes de Wuhan y evaluaban a cualquier pasajero que tuviera síntomas de fiebre o neumonía incluso antes de que pudieran descender del avión.

Los pasajeros que presentaban síntomas se les hacían pruebas para 26 virus incluyendo el SARS. Además fueron puestos en cuarentena en sus casas o llevados al hospital en caso necesario.

Otras medidas que tomó el gobierno de Taiwan fueron: tener bajo su control 44 millones de máscaras quirurgicas, 1.9 millones de máscaras N95 y 1100 cuartos de aislamiento de presión negativa; informar a la población sobre el uso adecuado de cubrebocas y otras medidas de higiene. Tambien se preocupó de enviar mensajes a la población para evitar la discriminación y promover que se enfrentara la pandemia de manera compasiva.

Fuente: “Response to COVID-19 in Taiwan Big Data Analytics, New Technology, and Proactive Testing”, JAMA, abril, 2020