14-02-2018
Por Emiliano Cassani, Ciencia UNAM-DGDC
El 14 de febrero, Día de San Valentín, se conmemora el concepto universal del amor, del afecto, del erotismo y demás expresiones de sentimientos hacia otros.
“El amor debe ser celebrado como a cada quien le guste pero definitivamente no es cosa de un solo día”, afirma Selma González Serratos, fundadora del Programa de Sexualidad Humana (PROSEXHUM) de la Facultad de Psicología UNAM.
El amor es un sentimiento que permite establecer vínculos afectivos de mucha intensidad, profundidad y compromiso. Puede ser de corta o larga duración si existe un vínculo dinámico y funcional entre una pareja o cualquier tipo de vínculo, como los poliamorosos.
Esa sensación de amor despierta sentimientos afectivos intensos que permiten proximidad entre las personas, parejas, grupos, amistades o entre padres e hijos. En esa relación se procura un buen trato y bienestar, describe la también miembro de la Society for Scientific Study of Sexuality de los Estados Unidos y representante internacional de la misma durante el periodo 2003-2007.
Pero a veces los celos o la dominación parecieran muestras de amor, cuando en realidad es posesión.
“Aunque la mayoría de las personas están convencidas de que están enamoradas, en ocasiones ese sentimiento en realidad es de un amor posesivo. En la sociedad patriarcal el varón posee y domina a la mujer, a eso le llaman amor pero no lo es. Entran en juego los celos, la desconfianza y sin libertad, no puede haber amor. Debemos aprender a relacionarnos como sujetos, no como objetos.”
“Para mí la parte amorosa tendría que permitir flexibilidad en la relación, libertad y confianza mutua para que puedan fluir y expresar un buen trato entre dos personas.”
El erotismo es esa sensación física y emocional que despierta en una relación donde no necesariamente tiene que ver el amor, sino solamente la atracción, no es fijo ni privativo. La parte erótica es aquella que está también puesta en muchas representaciones de tipo artístico, en la pintura, danza, música, literatura, eso puede ser muy erótico y cotidiano, expuso la psicóloga.
El erotismo da mucho placer, tiene muchos significados y representaciones de tipo cultural, está presente en un vínculo que tiene que ver con la sensualidad, que se puede llevar al terreno sexual o no, que puede quedarse en los terrenos de lo imaginario y de los símbolos y significados.
En su opinión, la esencia del erotismo y la sensualidad es algo para ejercer en lo cotidiano, más allá de una fecha como el 14 de febrero.
“El día de San Valentín, tiene más que nada un componente fundamentado en la cuestión mercantil-económica de la venta de chocolates, dulces o flores. Una pareja debe apelar a un vínculo más real, a la emoción que se despierta entre una persona y otra, pero fuera de lo que dicta la sociedad del consumo, eso es algo perverso”, afirmó la especialista en sexualidad humana.
Cabe destacar que un estudio sobre los hábitos de consumo de los mexicanos para el día de San Valentín, realizado por Tiendeo.mx, reveló que para este 14 de febrero los hombres gastarán en promedio mil 334 pesos, mientras que las mujeres 833 pesos.
“En este día se puede caer en el juego de encender velas, de poner pétalos de rosa alrededor de la cama, una cena romántica, que la mujer se ponga un negligé. Pero se arruina todo el momento si se vuelve mecánico y absurdo, un deber ser por un día se convierte en un cliché que hace que se pierda la sensualidad y lo erótico.”
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