Dos investigadores al servicio de México

Los doctores Singaraju Sri Subrahmanya Sarma y Nandini Sarma, originarios de la India, consideran que una de las partes más importantes de la ciencia es su divulgación, pues a partir de ésta es que se desarrolla la investigación y se conoce lo que se hace en cada uno de los laboratorios del mundo.

Ambos son investigadores de la Unidad de Morfofisiología y Función (UMF), de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala de la UNAM. Él llegó al país en 1995, tras una estancia en Bélgica. Entonces atendió una convocatoria del CONACyT para convertirse en investigador nivel II de Cátedra patrimonial  y el director del campus Iztacala en ese entonces le ofreció una plaza.

Desde aquel momento, se dedica a la ecología del zooplancton de agua dulce. Año y medio después, regresó a la India (de donde ambos son originarios) y se casó con la doctora Nandini Sarma, a quien había conocido durante su posgrado. “Estamos trabajando juntos desde ese tiempo”, afirmó el doctor Sarma.

Ambos llevan casi 20 años preparando a alumnos de licenciatura y posgrado en la FES Iztacala e impulsándolos para que publiquen sus trabajos en revistas arbitradas, lo que ha provocado que el suyo sea uno de los laboratorios con mayor productividad en toda la UNAM, pues al año publican alrededor de 10 artículos, en los cuales participan alumnos desde el nivel licenciatura.

“La desventaja aquí (en México) es que mucha gente no comunica tan bien en inglés como deben, son tímidos para enviar los resultados de su investigación y por eso el número de publicaciones es bajo y no debe de ser así, porque la calidad del trabajo está ahí. La cuestión es que ellos agarren la confianza. Por eso damos varios monográficos a los alumnos, desde la licenciatura hasta el doctorado, y eso ayuda a que la gente agarre confianza para publicar. Todos tenemos el miedo de que nuestro artículo sea rechazado, pero necesitamos superar eso”, reconoció la doctora Nandini Sarma.

Además, ambos investigadores se esfuerzan porque los alumnos universitarios conozcan lo que está pasando a nivel mundial en su área: la ecología acuática. Por ello, cada año traen a reconocidos especialistas internacionales a su laboratorio para que impartan cursos y compartan sus experiencias con los estudiantes o motivan a sus pupilos para que visiten laboratorios de otras partes del mundo y estén en contacto con esos profesores que son los pilares de su área de investigación.

Aportaciones científicas

El doctor Sarma, quien se ha hecho acreedor al Premio Estatal de Ciencia y Tecnología que otorga el Estado de México (2005), y la doctora Nandini Sarma, ambos distinguidos con el Premio al Mérito Académico de Iztacala e investigadores nivel III del SNI, se dedican al estudio de la ecología del zooplancton de agua dulce.

El zooplancton es una parte de la cadena trófica en los sistemas acuáticos y forma parte clave de ella porque lleva la energía de los productores primarios hacia los peces. Además, es muy importante para la alimentación de las crías de los peces, quienes de no comerlo empiezan a morir. Asimismo, permite comprobar la calidad del agua, pues se hacen muchos ensayos con él. “Si queremos comprobar qué impacto tendrán las cianobacterias sobre la salud del agua podemos usar el zooplancton para hacer ensayos”, afirmó la premio Sor Juana Inés de la Cruz.

Otro aspecto que se puede estudiar es lo que se llama ecología evolutiva, pues el zooplancton tiene ciclos cortos de vida. De esta forma, se pueden comprobar en muy corto plazo varios efectos, como el impacto del cambio climático, de ciertas toxinas o de cierto tipo de alimentos.

Actualmente, los doctores Sarma dirigen el Laboratorio de Zoología Acuática de la FES Iztacala. Ello ha sido posible gracias al trabajo conjunto que han realizado con otros investigadores como el maestro Mario Alfredo Fernández Araiza, y los doctores Pedro Ramírez García y Javier Alcocer. Asimismo, tienen alrededor de 30 alumnos con quienes trabajan la taxonomía y la ecología del zooplancton. 

“Ecología acuática quiere decir que uno va a conocer qué tipo de organismos están en un cuerpo de agua en relación a su ambiente. Nosotros fijamos el plancton y lo traemos aquí, a revisar su diversidad y densidad”, dijo la doctora Sarma.

Los investigadores trabajan en el Lago de Zumpango, el embalse de Madín, en Chapultepec y Xochimilco, así como en el embalse Valle de Bravo. Además, desde hace tres años comenzaron a laborar en ríos (en La Antigua, Veracruz y en Amacuzac, Morelos), pues hay muy pocos estudios de plancton en estos ambientes acuáticos.

La trayectoria de ambos universitarios es muy importante, sin embargo, una de sus grandes aportaciones es la formación de estudiantes y por lo mismo destacan que varios de sus alumnos ahora son miembros del SNI o profesores de tiempo completo. Ambos reconocen que lo que más les gusta de México es su gente: “Nos han aceptado con su corazón abierto y nunca hemos sentido rechazo de ninguna manera”, refirió la profesora.

Tal vez por ello, ambos creen que su estancia en México dependerá de qué tan útiles sean para el país y sus estudiantes.