encabezado_seccion
encabezado_seccion

Los adultos mayores menos vulnerables que los más jóvenes

¿Cuáles son las condiciones en el estado de nuestros cuerpos para desarrollar enfermedad?

17-01-2025

Por Rolando Ísita Tornell-DGDC*


Los inviernos de la pandemia y postpandemia incorporaron a nuestro lenguaje y percepciones a las poblaciones vulnerables: obesas, diabéticas, hipertensas, con enfermedades crónico-degenerativas. De todas ellas en primer término destacaron las de adultos mayores de 60 años

Vulnerables por tener las condiciones en el estado de nuestros cuerpos para desarrollar enfermedad grave por la infección del SARS_CoV-2 en la pandemia.

En el caso de México y en el mundo, desde marzo del 2020 se advirtió la vulnerabilidad de los mayores debido al estado ya muy conocido de la inmunosenescencia, por evolución natural el sistema inmune decae con la edad, el arsenal de nuestro equipamiento para enfrentar infecciones, intoxicaciones, inflamaciones, fluidez de la sangre en el sistema circulatorio y los componentes equilibrados de la misma aumentan o decaen.

Algo distinto se manifestó con otras edades, no fueron los adultos mayores quienes más desarrollaron enfermedad grave y los lamentables decesos, fueron infectados que padecían obesidad, diabetes, hipertensión o anomalías cardiovasculares y pulmonares (el tabaquismo, acusadamente), comorbilidades les llamaron.

Hace 40 años escuchar de diabetes, obesidad era asunto de “viejitos”. Hoy, los viejitos resultaron más resistentes, las tasas de positivos, enfermos graves y fallecimientos fueron de menores de 60 años y mayores de 30.

En las últimas cuatro décadas carecimos de una cultura, de una educación para la salud que antes sí se impulsaba por lo menos en el sistema de educación pública y, en cambio, se multiplicó la oferta de mercancías comestibles baratas con gran cantidad de azúcar, grasa y calorías, consumida por todas las familias y acusadamente los menores.

La obesidad y la diabetes dejaron de ser asunto de viejitos y se convirtió en problema de salud pública de menores.

Mientras, y por otro lado, pulularon medidas, tratamientos y dietas milagrosas o francamente falsas y agresivas contra el sobrepeso y la talla, no sobrepasarlos se tornó en problema de vida o muerte, destacando el caso representativo de la cantante estadounidense Karen Carpenter en los años 80.

Las jóvenes se miraban al espejo y se percibían gordas, sometiéndose a ayunos salvajes y distorsionando en sus mentes la percepción de sus cuerpos, desarrollando las patologías de la bulimia y la anorexia.

Recién se han publicado investigaciones en modelos animales que, si bien no son concluyentes, sí ayudan a derribar mitos y creencias sobre las dietas, sustentarlas, y en algunos casos a aportar otros factores que ayudan a arribar a una vejentud sana y más prolongada sin achaques, también a una inmunosenesencia menos vulnerable.

En principio, “la genética importa más que la dieta para alargar la vida”, según reza el título de uno de los estudios (09/10/24), pero también “comer mesuradamente puede llevar a una vida más larga”, reza otra de las investigaciones (09/10/24) ambas publicadas en el portal de la revista científica Nature.

En efecto, “la genética -la herencia biológica de nuestros padres- tiene una mayor influencia en la vida útil que la restricción dietética”, pero también se mostró que “la restricción calórica y el ayuno intermitente resultaron en una extensión de la vida útil en proporción al grado de restricción”.

Los resultados en 960 ratones fueron muy alentadores, pero un epidemiólogo que estudia el envejecimiento “alertó contra la extrapolación excesiva de los resultados de los ratones a los humanos”, además de que salud y longevidad no son lo mismo.


 


* Periodista y comunicador de la ciencia



Publicaciones relacionadas

Adultos mayores en la era digital

Jóvenes ¿los menos vulnerables al coronavirus?

Alcoholismo, enfermedad que gana víctimas jóvenes


Explora la ciencia en la UNAM en tu formato preferido

Enrédate         Síguenos en nuestras redes sociales

 

Gacetas UNAM

 

Misión espacial

 

Covid-19

 

Navega por la Ciencia en la UNAM


Ciencia Joven

Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)
Dirección General de Divulgación de la Ciencia (DGDC)
Hecho en México. Todos los derechos reservados 2025. La información aquí publicada tiene como fuente principal a investigadores de la UNAM y es responsabilidad de quien la emite; no necesariamente refleja el punto de vista de esta institución. Los contenidos pueden ser reproducidos con fines no lucrativos, siempre y cuando no se mutile, se cite la fuente completa y su dirección electrónica. De otra forma, requiere permiso previo por escrito de la institución. Créditos

Apoyado por Proyecto PAPIME PE306815

Sitio web administrado por:
Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la UNAM

Desarrollado por Smart Systems

/DGDCUNAM