GALERÍA FOTOGRÁFICA: Manglares, como nunca los has visto

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  Los manglares son la vegetación de árboles o arbustos que se desarrollan en las zonas costeras tropicales a la orilla de lagunas costeras, bahías, ensenadas, estuarios y regiones expuestas al mar, pero con poca energía de oleaje.

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  Son de los ecosistemas más productivos del planeta; Ahí se produce mucha hojarasca y así junto con esta contribuye a enriquecer las zonas costeras, lo cual lo convierte en una zona de alta diversidad y un hábitat importante de apoyo a las pesquerías.

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  La zona más extensa de manglar que tiene México es Marismas Nacionales, en Nayarit y Sinaloa; comprende más de 150 mil hectáreas. Es la más extensa del Pacífico de América.

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  Cada especie de manglar requiere de un tiempo particular de inundación, y cuando hay pendiente se puede observar claramente la zonación de cada especie. Es común que unos pocos centímetros del nivel del suelo determinen la presencia de una u otra especie.

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  Los manglares son un importante refugio de especies amenazadas o en peligro de extinción como los cocodrilos y los jaguares. Además, son un refugio y zona de alimentación de aves migratorias como los flamingos y muchas otras.

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  Los manglares, independientemente de su especie, pueden crecer de 25 a 30 metros de altura, excepto en Ecuador que llegan a los 64 m de altura. Esto ocurre en condiciones óptimas de desarrollo. La diferencia la determinan varias situaciones como los aportes de agua dulce rica en nutrientes o las condiciones altas de salinidad.

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  La distribución latitudinal de los manglares en México está determinada por el clima y la unidad morfotectónica donde se ubica. Hacia el noroeste, las condiciones de aridez y de escasa precipitación limitan su distribución a franjas angostas y discontinuas.

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  70% de las especies útiles para la pesca mundial son organismos que viven o parte de su ciclo de vida transcurre en lagunas costeras asociadas a manglares.

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  La destrucción de manglares es una grave problemática ambiental, sobre todo por la construcción de desarrollos turísticos, la acuacultura y la construcción de presas. Esto último causa erosión de playas y dunas exponiendo directamente al oleaje a los manglares y provocando su muerte.

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  De acuerdo con la Conabio, en México se detectó una disminución en la cobertura de manglares a finales de los años 70 y principios de los 80 de 856 mil 405 hectáreas a 764 mil 774 hectáreas en el 2010, lo que equivaldría a 11% en 30 años.

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  ¡Larga vida al manglar! En México y en diversas partes del mundo se han hecho grandes esfuerzos en la restauración del manglar como ecosistema; se ha visto que combinar programas de reforestación con la restauración hidrológica ha tenido altos índices de éxito. En nuestro país, algunos programas se han llevado a cabo en Chiapas, Campeche, Yucatán, Quintana Roo, Sinaloa y Nayarit.