29-09-2015
Por Isabel Pérez S., DGDC-UNAM
Aficionada desde niña por el comportamiento humano, Alicia Elvira Vélez García es una neuropsicóloga que durante su amplia trayectoria ha logrado distinguir las áreas cerebrales que participan en procesos emocionales.
En la psicología ha descubierto todas las posibilidades de explorar la mente a través de métodos biológicos, comportamentales y métricos.
Incorporarse al Laboratorio de Neuropsicóloga y Psicofisiología de la Facultad de Psicología de la UNAM, bajo la batuta de la doctora Feggy Ostrosky, ha significado un gran paso e impulso para su carrera; fue en la licenciatura cuando comenzó a estudiar la atención en niños en dicho laboratorio.
Las emociones morales captaron su interés desde hace tiempo; en ellas encontró un objeto de estudio que marcaría su carrera. Estas emociones se conectan con los intereses o el bienestar de la sociedad, pueden ser positivas (empatía, gratitud, exaltación y orgullo moral) o negativas (vergüenza, culpa y disgusto).
“Este era un tema novedoso hace más de diez años, y me resultó tan apasionante que lo abordé en mi tesis doctoral”, describió Alicia Vélez.
La interpretación de reglas sociales y universales, el evitar hacer cosas que dañen a otros seres humanos, son parte de estas emociones morales que han sido mi objeto de estudio y que he continuado investigando a lo largo de mi profesión, compartió la académica de la Facultad de Psicología de la UNAM.
La especialista imparte clases sobre todo en el campo de las neurociencias, en lo que tiene que ver con la psicofisiología, cognición y cuestiones de cómo se liga el comportamiento con las bases biológicas, así como trastornos, trastornos del lenguaje y demencias.
Alicia Elvira Vélez es tutora de la especialización en neuropsicología. Inicialmente y antes de adentrarse en ese ámbito, se dedicó a la investigación en farmacología conductual en donde trabajó con animales, con el fin de detectar los efectos tanto a nivel celular como comportamental que causan los fármacos.
¿Cómo descubrió que su futuro profesional estaba en la psicología? Le preguntamos. “Fue algo muy natural, porque desde muy pequeña me gustaba observar a la gente, interpretar su comportamiento y con el paso del tiempo eso me llevó a darme cuenta que la psicología es a lo que quería dedicarme, que era esto lo que quería hacer”.
Siempre me ha gustado descifrar lo que pasa en el cerebro; cuando encuentro correlatos biológicos me doy cuenta que es la psicología realmente me apasiona y que no me equivoqué al elegir esta carrera.
Una de sus más grandes satisfacciones profesionalmente hablando, fue el terminar el doctorado porque, dice, ya tenía la madurez suficiente para comprender lo que había hecho. En ese momento supo que tenía la conciencia y mayor dominio sobre su área de trabajo; tenía sus objetivos más claramente focalizados.
Alicia Vélez, en coordinación con la doctora Feggy Ostrosky, aplica el conocimiento de las emociones morales al estudio de factores biológicos en individuos que presentan rasgos de violencia.
En 2011, fue galardonada como parte de los "30 Personajes que Transforman a México” en la categoría de Conciencia (Neuropsicología), que entrega la revista Quo y Discovery Channel. Esta distinción reconoce la materialización de ideas de mexicanos que han adquirido una nueva dimensión social gracias a su trabajo y dedicación.
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